Estratégicamente situado en uno de los vértices de Central Park, el hotel Hudson es una magnífica base de operaciones para el viajero sibarita. Su localización, a un paso del mítico Central Park, permite el acceso a pie a los imprescindibles de Nueva York, como Times Square o el Carnegie Hall. Disfrútalo como prefieras: como refugio nocturno después de un largo día descubriendo la ciudad o como una atracción más a explorar, con todo lo que ofrecen sus zonas comunes.
Podrás elegir entre una gran variedad de habitaciones en el hotel Hudson. Todas ellas cuentan con baño privado completo y televisión, amplias camas y decoración de maderas nobles, inspirada en el romanticismo de los viajes transatlánticos, sin renunciar a las comodidades modernas. Desde la ropa de cama a la iluminación, todo está diseñado con mimo y cuidado. No está permitido fumar en ninguna de las habitaciones y tampoco se admiten mascotas.
El compromiso del grupo hotelero al que pertenece el hotel Hudson con el crecimiento sostenible ha llevado a la adopción de muchas medidas de reciclaje y ahorro de energía, como la instalación de luces que se activan mediante un sensor de movimiento. También están comprometidos con un uso racional del agua, de forma que sus sistemas de grifería reducen al mínimo las pérdidas de la misma. En su oferta de restauración intentan reducir la huella de carbono apostando por los ingredientes locales al diseñar sus menús.
El hotel dispone de varias opciones de restauración, de forma que en él es posible desayunar, comer, cenar y tomar unas copas o un tentempié a cualquier hora del día. En algunos de sus bares tienen lugar eventos como catas de vinos o de cócteles a los que es posible unirse. Nueva York no termina en recepción: el alma neoyorkina continúa dentro del hotel.