Este hotel se encuentra a medio camino entre la calle Sloane y la calle Ecke Pont. A pocos minutos se encuentran las tiendas de Knightsbridge, Harvey Nichols y Harrods, las tiendas de diseño de la calle Sloane o la famosa Kings Road. Asimismo, en un corto trayecto en taxi puede llegar a las tiendas de antigüedades de Pimlico. Con el taxi también se puede desplazar fácilmente al distrito de los teatros y al West End londinense, donde se encuentran los restaurantes y clubs más glamorosos. Además, delante del hotel hay una parada de transporte público.
Desde hace más de 100 años el hotel se caracteriza por su discreción y proporciona al huésped un acogedor alojamiento lejos de casa. Desde que se inauguró el hotel ha sido el destino ideal para los huéspedes más exigentes. Cuenta con un total de 65 habitaciones, 4 de ellas suites, repartidas en 5 plantas. En el encantador vestíbulo de entrada hay una recepción (abierta las 24 horas del día), una caja fuerte, servicio de cambio de divisa, guardarropa y ascensores. El edificio está climatizado y alberga un bar y un restaurante con zona para fumadores. Tiene a su disposición un comedor, una sala de conferencias y conexión inalámbrica a Internet. Como prestaciones adicionales se le ofrecen las 24 horas los servicios de habitaciones, de lavandería y de atención médica (con suplemento). En definitiva, el hotel ofrece el ambiente de una casa privada, combinado con la elegancia inglesa de otros tiempos. La moderna elegancia conecta a este edificio histórico con el siglo XXI.
