Hotel Bartolomeo Hotel

En pleno corazón de Venecia, el Hotel Bartolomeo, se convierte en una atractiva opción para los que han elegido esta ciudad italiana como lugar de visita o descanso. Los aires palaciegos presentes en el edificio que alberga este encantador hotel, y su situación a escasos metros del puente de Rialto y a 5 minutos de la plaza de San Marcos, es uno de los atractivos más singulares de esta oferta hotelera.

Las habitaciones acogedoras con de baño privado, secador de pelo, TV vía satélite, teléfono de marcación directa, aire acondicionado, caja fuerte electrónica y una recepción 24 horas son algunos de servicios de que ofrece este hotel a sus huéspedes, además de la posibilidad de un de desayuno cada mañana en una de las salas de su recinto en que se incluye surtido dulce o gama de quesos.

El Bartolomeo Hotel, además de sus infinitas comodidades, es una gran opción para hacer turismo en la ciudad de los canales, que aún mantiene ese espíritu que la convierte en ciudad única en el mundo. Un lugar con su propio concepto de belleza sobre una ciudad lagunar con influencias bizantinas, palaciegas, góticas o propias del Renacimiento.

Cultura, historia y lugares de obligada visita a un paso de este alojamiento en el que está permitido el alojamiento de niños de todas las edades. No se contempla la posibilidad de colocación de camas supletorias en las habitaciones y se admiten mascotas.

Un enclave que te posibilitará además de un descanso confortable y cómodo para tus ratos de asueto, un lugar desde el que llegar caminando a lugares de la ciudad como el Monumento de Bartolomeo Colleoni, a 350 metros o al Palazzo Contarini del Bovolo.

Alojarte en lo más parecido a un palacio con todo el confort que necesitas para tus vacaciones en la ciudad a la que siempre querrás volver.

El Bartolomeo Hotel, ubicado en San Marco 5494 en Venecia, se caracteriza por su increíble ubicación y proximidad con lugares que estarán entre tus visitas previstas durante tu estancia en la ciudad italiana.

Así y en un radio de 400 metros como máximo llegarás hasta lugares como el Puente de Rialto, el Teatro Malibran, el Teatro Goldoni, el Monumento de Bartolomeo Colleoni, el ?Palazzo Contarini del Bovolo, la Estación de Ca' d'Oro, el Campanario de San Marcos, el ?Negozio Olivetti, las Procuradurías de Venecia o Ca' d'Oro.

Sin que tengas que andar mucho más y para que dibujes el enclave y las posibilidades que te ofrece este hotel, cabe señalar que si se amplia este radio a una distancia máxima de 1,3 kilómetros podrás visitar lugares como la Basílica de San Marcos a 400 metros, la Plaza de San Marcos, el Palacio Ducal a 500, el Puente de los Suspiros, San Polo, La Fenice, el Casino de Venecia a 800 metros, la Estación San Marcuola, la Estación de tren de Venecia Santa Lucia o San Michele a 1,3 kilómetros.

Puente de los Suspiros

A 550 metros del hotel podrás llegar hasta el Puente de los Suspiros. Una cita con una de las imágenes que habrás visto hasta llegar allí en muchas postales. Lugar emblemático de la ciudad por excelencia, ubicado sobre un pequeño canal en la fachada posterior del Palacio Ducal en la Plaza de San Marcos.

Te llamará la atención su ubicación o las características de donde está situado, pero Venecia es así: una ciudad llena de sorpresas y de dimensiones solo apreciables una vez que estás allí. Visita obliga pues al puente que fue construido con el fin de unir dependencias del Palacio Ducal con la edificación que albergaba calabozos. De ahí su nombre en honor a los suspiros que daban los reos cuando iban a ser ajusticiados.

La Plaza de San Marcos

Además de paseos en góndolas y de los tantos lugares que debes visitar en una ciudad que no tiene desperdicio alguno, no podrás -porque de hecho no lo harás- dejar de visitar la Plaza de San Marcos. Tu cita con las palomas y con el objetivo de tu cámara se encuentra a 400 metros de tu alojamiento. Un paseo que merecerá la pena.

Una visita que se completará con la Basílica de San Marcos, donde podrás ver los cuatro caballos que datan de la época clásica, esculpidos en cobre. El vestigio más llamativo de las cruzadas sobre el pórtico central de la basílica.