La guía definitiva para cuidar tu piel en tus vacaciones verano
Llegan las altas temperaturas y con ellas el tiempo libre, pero también llega el sol potente ¡y hay que cuidarse en vacaciones! Si quieres tener una piel fresca y radiante te recomendamos que leas nuestra guía para aprender a cuidar la piel en verano.
¿La mejor manera de evitar quemaduras y la aparición de esas temidas manchas, erradicar las rojeces del cutis, posponer la aparición de arrugas? Te damos la clave: tener una piel perfecta en verano depende de aplicar unos pocos buenos hábitos y utilizar algunos productos adecuados para este período caluroso del año.
Sigue nuestra guía de consejos y verás que los resultados llamarán la atención:
Protectores solares: lo primero es lo primero
Lo has oído mil veces, pero no siempre te lo tomas al pie de la letra… ¡Pues deberías! El primer secreto de una piel joven y sana es la protección solar. Hazte con una buena crema con un índice bastante alto, a partir de 30. Lo agradecerás. ¡Y no olvides ponértela antes de salir de casa! Así es, los protectores solares no sirven solamente para la playa. Se aconseja aplicarlos para toda exposición al sol y volver a ponerlos al cabo de dos horas para que no dejen de hacer efecto.

Cremas y brumas hidratantes: el agua es vida
La bruma hidratante (o una crema ligera) puede convertirse en tu mejor amiga. Para compensar la pérdida de agua debida a la transpiración es muy importante hidratar la piel. Un agua termal en espray es una de esas cosas que siempre deberías llevar en tu bolso en verano. También puedes utilizar aguas florales que sean calmantes o que regulen las rojeces del cutis. Aportarán frescor a tu rostro.
Mascarillas y geles calmantes: cuidarse en vacaciones
Tómate cinco minutos cada día: un gel calmante o una mascarilla pueden aliviar tu rostro de las agresiones de las intensas jornadas estivales. Hay gran variedad de mascarillas y geles, elige la más adaptada a tus necesidades del momento: para combatir las manchas, hidratar o para luchar contra las rojeces. Una sesión de relajación para tu epidermis: breve y eficaz.

‘Nutricosméticos’: la alimentación de la piel
¿Sabes para que sirven? Se trata de aplicar tratamientos de cosmética a través de la alimentación. Tu piel te lo agradecerá infinitamente. La idea es cuidarse no solo por fuera, sino también desde dentro. ¿Quieres un ejemplo? Un poco de vitamina C. Un buen zumo de naranja o un par de piezas de fruta para el desayuno pueden ser tu aliado para cuidarse en vacaciones. La vitamina C es un formidable antioxidante y favorece la mejor pigmentación de la epidermis. Unos trozos de aguacate en tus ensaladas y una rodaja de salmón a la brasa te ayudarán a cuidar la piel en verano: te dará un brillo sano en la cara ¡Y no te olvides de las alcachofas, un alimento repleto de antioxidantes!
Como ves, cuidar la piel en verano es bastante sencillo, pero es recomendable aplicar estos consejos para conservar y favorecer un cutis ideal durante el período estival. ¡A disfrutar del verano!