Te presentamos las carreteras más asombrosas del mundo que, por su trazado y localización, no son aptas para todos los neumáticos. ¿Te atreves con ellas?
Repartidas por cada esquina del mundo existen autopistas que por la dificultad a la hora de recorrerlas, por el riesgo que implican y por su diseño han sido catalogadas como las más peligrosas del mundo. Te invitamos a que las cruces al menos una vez en la vida. Y si nos dices que además te atreves a hacerlo en moto, entonces ya sí que sí, nos rendimos a tus pies.
Autopista helada al fin del mundo
La Dalton Highway, conocida también como la Ruta 11, se encuentra en Alaska. Es la más aislada de Estados Unidos, no en vano su recorrido llega nada menos que hasta el Océano Ártico. Su localización es una de las razones determinantes para que sea tan peligrosa. Y es que en invierno sigue abierta, por lo que la puedes encontrar cubierta de hielo y plagada de nieve, así que tendrás que abrigarte mucho, muchísimo si te animas a recorrerla. Las nevadas pueden superar más del metro de altura y las ventiscas y niebla impiden la visibilidad, así que circular por aquí es toda una aventura. Si no que se lo pregunten a los conductores de los camiones petroleros que son prácticamente los únicos que la transitan (fue construida en 1974 para brindar soporte al oleoducto Trans-Alaska). En sus 667 kilómetros sólo existen dos ciudades Coldfoot y Wiseman, cuya población no supera el medio centenar. Una ruta que, aunque helada, cuenta con unas increíbles vistas, cruza varios bosques y el río Yukon. También atraviesa la cordillera de Brooks, que se extiende desde Alaska del Norte hasta Canadá y cuenta con más de 1.000 kilómetros de distancia.

La escarpada carretera que roza el cielo
La Karakorum Highway es la carretera construida a mayor altitud del mundo. Por esa razón atraviesa glaciares, picos a 7.000 metros de altura, un par de ‘ochomiles’, el Nanga Parbat y hasta el K2. Ha sido bautizada coloquialmente como la ‘novena maravilla del mundo’ o ‘la autopista de la amistad’. Lo de la amistad sin duda le viene dado porque conecta Pakistán y China a través del Paso Khunjerab, siguiendo la antigua Ruta de la Seda hacia Oriente. Su entramada orografía se debe a los continuos corrimientos de tierra provocados por estar encima del área de colisión entre las placas euroasiática e índica. Cuando hay desprendimientos de roca el tráfico se debe interrumpir durante horas para retirar el escombro. Y el clima no se queda atrás en cuanto a dificultad, dependiendo de la estación oscila entre los -30º y los -48º centígrados.
¡Aquí te vas a mojar!
Si te gustan las aventuras y el contacto con la naturaleza, la Gibb River Road es tu carretera. Adéntrate en el corazón de Australia para conocer la extensa región de Kimberley. Lo sentimos por tu moto, pero el mejor medio de transporte para transitarla es al volante de un 4×4. Pero has de hacerlo con respeto porque es un territorio salvaje que no está exento de peligros. Son 660 kilómetros de asfalto que te proporcionarán experiencias inolvidables como atravesar un río con tu coche, impresionantes cascadas y arte rupestre, vuelos panorámicos y paseos en bicicleta o a caballo. Puedes dedicar una semana a recorrerla de principio a fin, desde Derby a Kununurra, y descubrirás maravillas como el desfiladero de Windjana, el monte Hart Homestead, el desfiladero de Manning, el rancho Drysdale River y el Ellenbrae, el Parque Natural de El Questro y Wyndham. Una carretera de leyenda que te permitirá conocer a fondo esta increíble zona.
¡Agárrate que vienen curvas!
El África más salvaje tiene, cómo no, carreteras que también lo son. Es el caso del puerto Sani Pass a 80 kilómetros al sureste de Durban. Uno de los puertos emblemáticos de Sudáfrica y, a pesar de su complicación, de los más visitados. Un increíble paso fronterizo en lo alto del puerto de Sani que cruza el sur del continente desde las Drakensberg Mountains (montañas del Dragón) al interior del pequeño reino de Lesotho. La ruta, construida sobre 1950, era una ruta de bienes que no fue abierta para vehículos motorizados hasta cinco años más tarde de su construcción. Su peligrosidad, además de su relieve escarpado (pendientes muy pronunciadas y grava en el suelo), viene dada por sus casi treinta curvas en sus escasos diez kilómetros de longitud. Cuando llegues a su cima, encontrarás el ‘pub’ más alto de África con casi tres mil metros de altura. Como apunte curioso: es tan llamativa que muchos fabricantes de todoterrenos la utilizan como escenario para rodar sus anuncios. El terreno de esta ruta se vuelve impracticable en invierno y con las lluvías. Sin duda es una carretera que, aunque dura y peligrosa, merece la pena conocer. Eso sí, no olvides llevar tu pasaporte y los visados necesarios para poder completarla ya que sino no te quedará más remedio que darte la vuelta en la cima. ¿Te animas a hacerlo sobre dos ruedas?
Y para hacer rutas en motos os presento uno de los pueblos mas Bonitos de España, Alcalá del Júcar (Albacete) que por la forma de sus calles estrechas,es especial para recorrerlo en Moto,y para dormir recomiendo sus Casas Rurales Cueva.
Soy motero y me encanta salir de rutas. mi zona favorita con diferencia, la zona de gredos. es una zona preciosa, da gusto pasear con la moto por ésta zona