Este hotel urbano está situado en la plaza principal de Hvar, justo detrás de la torre veneciana del reloj y a 5 minutos de camino de la playa, el arsenal y teatro, la catedral y las islas Paklinski. El aeropuerto de Split dista aproximadamente 75 km.
Éste es el hotel más antiguo de Hvar, fue construido en 1898 y es una gran dama enmarcada en arquitectura gótica y renacentista. Para los amantes de la historia, esta ubicación céntrica es particularmente interesante, ya que permite disfrutar de románticas vistas de la antigua plaza y de los edificios vecinos, como la catedral de San Esteban, así como de las espléndidas puestas de sol sobre la bahía. El hotel en sí tiene el encanto y la gracia de su época y un carácter que refleja el de la propia isla. Los huéspedes pueden comer acompañados de la música en directo de un conjunto en la terraza del restaurante Palm, desde donde se ve el puerto de yates. Desde el ambiente adriático a la arquitectura de época y los conjuntos que tocan en directo
Todo en este hotel es una vivencia clásica. Se trata de un establecimiento con aire acondicionado, renovado en 2008 y con un total de 73 habitaciones. Dispone, además, de vestíbulo con servicio de salida y recepción 24 horas y conexión a Internet WiFi.
El hotel ofrece una gran gama de habitaciones y suites a la medida de las necesidades y preferencias de sus huéspedes en lo que respecta a tamaño y vistas. Estos pueden elegir entre vistas al mar, a la ciudad o a la fortaleza. Además, las habitaciones tienen unas instalaciones y muebles modernos que proporcionan confort y funcionalidad y que permiten disfrutar plenamente del encanto y la belleza natural de este hotel histórico. Las comodidades estándar incluyen ducha, cama extra grande y TV.
