El Rocamar Hotel cuenta con 5 plantas con ascensor compuestas por 88 elegantes y luminosas habitaciones con balcón (la mayoría con vistas al mar o a la piscina). Todas ellas disponen de televisión de plasma, baño completo, aire acondicionado y calefacción y minibar. Todas las habitaciones, a las que se accede con tarjeta, cuentan con amenities en el baño para los huéspedes y con secador de pelo.
Durante los meses de temporada alta hay un amplio programa de animación para todos los públicos y su piscina de borde infinito está rodeada de una terraza solárium con vistas al mar. En esta zona también hay servicio de bar.
El servicio de limpieza de las habitaciones es diario. La ropa de cama se cambia, por lo general, 2 veces por semana, y las toallas 3 veces por semana.
Con un suplemento podemos acceder al alquiler de bicicletas o de coches, al servicio de niñera, al de habitaciones y al de lavandería. Por una fianza, en la recepción del mismo Rocamar Hotel, se prestan toallas para la playa o la piscina. También podemos consultar por el servicio de consigna de equipajes o de caja fuerte.
Para un mayor relax, el hotel tiene una zona de spa en la primera planta con una gran variedad de tratamientos de estética tanto faciales como corporales con un toque exótico. Además, cuenta también con un pequeño gimnasio, una sala de juegos de todo tipo y una sala comuna de televisión con wifi gratis.
El restaurante nos ofrece comida regional y platos internacionales tanto al mediodía como para las cenas, además de gran calidad y variedad en su buffet. También tenemos la posibilidad de optar por el menú o la carta.
En la planta alta del hotel se encuentra una azotea con terraza desde donde podemos contemplar la belleza del Océano Atlántico.