El hotel Papi ha diseñado sus servicios basándose en el público familiar que están acostumbrados a recibir. Es por este motivo que, las habitaciones tienen espacio suficiente para instalar camas supletorias, y que las camas matrimoniales que ofrecen son de tamaño king size para poder acoger a padres e hijos. Todas ellas cuentan con aire acondicionado, televisión LED con canales internacionales y un baño completamente equipado. Además, disponen de balcón con vistas al exterior para que entre luz natural, y las de modalidad Premium Garden con una terraza privada para poder disfrutar de las noches mediterráneas.
Los clientes del hotel Papi pueden solicitar al servicio de habitaciones todo aquello que necesiten. Para ello, solo tienen que contactar con la recepción que está a pleno rendimiento las 24 horas del día. En esa instalación también pueden alquilar una caja fuerte y, en caso de necesitarlo, realizar un cambio de divisas.
Pensando en los huéspedes de más corta edad el hotel cuenta con una zona de juegos infantil y un miniclub, además de animación específica para ellos durante la temporada alta.
Entre las zonas más importantes del hotel destacan sus dos piscinas de agua salada, rodeadas de más de 1.000 metros cuadrados de solárium. La más pequeña, para niños, cuenta con una seta de agua. La grande está equipada con cascada y jacuzzi. Un segundo se encuentra ubicado en altura, ofreciendo vistas de toda la terraza. También dispone de aquapark, compuesto de torres y toboganes en la misma zona.
Para pasarlo en grande hay que dejarse llevar por las actividades propuestas por el equipo de animación. Son tanto para mayores como para niños. Y, si alguien necesita hacer una parada para reponer fuerzas, el hotel pone a su disposición un bar en el que se sirven ricos cócteles y refrescos, además del restaurante con platos de tradición y show cooking.