Hoteles en Dublin
Irlanda es un país dinámico, animado, en el que resulta muy agradable tomarse una cerveza local en sus tradicionales y acogedores pubs, salir de compras por sus calles comerciales o saborear las espectaculares tartas caseras que también caracterizan a esta gran ciudad. Además, Dublín destila cultura, intelectualidad y carisma, y cuenta con atractivos enclaves turísticos para todos los gustos y visitantes.
Sin duda, reservar alguno de los hoteles baratos en Dublín y pasar en la ciudad unos cuantos días es un plan regenerador que puede disfrutarse en familia, en pareja, con amigos o en solitario. Una opción espectacular es reservar un alojamiento en Dublín en el entorno de una de sus dos calles principales: O'Connell Street y Grafton Street. La primera de ellas es la arteria neurálgica de la capital irlandesa y está plagada de bares, restaurantes, comercios y esculturas memorables. Por otra parte, la peatonal Grafton Street es la calle dublinesa más concurrida, en cuyo recorrido se localiza la popular estatua de Molly Malone.
No resulta difícil encontrar buenos motivos para aprovechar cualquier oferta de hoteles en Dublín de Viajes Carrefour, tomar un vuelo y sumergirse en la aventura dublinesa. Si te gustan la cerveza y el whisky de buena calidad, no hay mejor destino en toda Europa que esta interesante ciudad. En ella podrás realizar tours turísticos organizados por la destilería Jameson y por la factoría de cervezas Guinness. También resulta mítico saborear un brownie de birra, chocolate, mermelada de fresa y nata en el Gravity Bar, cuyas vistas panorámicas de 360º sobre la ciudad son incomparables. La animación, tanto diurna como nocturna, es asimismo un imán para los turistas que buscan diversión y buen rollo. Existen pubs y discotecas de todos los estilos, horarios y ambientes musicales, en los que no resulta complicado trabar amistad con los lugareños.
La capital irlandesa siempre deja un buen sabor de boca. Tanto si decides aprovechar una oferta de hoteles en Dublín con todo incluido como si te lanzas a la aventura de descubrir los mejores restaurantes de la ciudad, saborearás una gastronomía original y, cada vez, más internacional. Además de los fish & chips (pescado con patatas) y el black pudding con el que siempre se ha asociado a la ciudad, los amantes de la buena repostería y de los sabrosos platos de carne se sentirán más que satisfechos. En cuanto al ámbito intelectual, en Dublín resulta fácil explorar grandes atractivos culturales como el Trinity College, una de las universidades más famosas del mundo, el Museo de Ciencias, The Kerlin Gallery, el Castillo de Dublín o la Cárcel de Kilmainham. En el plano comercial, en Dublín es posible encontrar prácticamente de todo: desde ropa fashion de segunda mano a artículos de lujo, discos y obras de arte.
La capital de Irlanda se puede visitar durante todo el año. Sin embargo, existen algunas fechas destacadas en las que la ciudad adquiere un color y un ambiente realmente especiales. Es el caso del Día de San Patricio, que se celebra el 17 de marzo y se ha convertido en una de las conmemoraciones mundiales más populares. La Fiesta de Mayo, en la que se decoran los árboles con flores y se celebran bailes populares, el festival del fuego celta, que tiene lugar el 23 o el 24 de junio, el Samhain (Halloween en el resto del mundo) y la fiesta del Inicio de Noviembre son otras fechas especiales para vivir en Dublín experiencias aún más singulares.
Anímate ya y descubre los encantos de esta ciudad irlandesa con Viajes Carrefour. Aprovecha las ofertas de apartamentos y hoteles baratos en Dublín que ponemos a tu alcance y regálate un viaje inolvidable a este lugar único. Muévete por la ciudad, disfrútala de día y de noche, bebe su cerveza, degusta sus sabores, escucha su música, sal de compras y déjate envolver por sus atractivos culturales e intelectuales. Regálate unas vacaciones fabulosas en esta capital incomparable.
Dublín es una ciudad extraordinaria, encantadora, atractiva y llena de sorpresas. La animación diurna y nocturna, las jarras de cerveza y los vasos de whisky de excepcional calidad, la gastronomía exquisita, las zonas comerciales, el patrimonio arquitectónico, cultural e intelectual y la refrescante belleza verde de esta capital irlandesa son argumentos suficientes para convertirla en un destino perfecto en el que pasar unas vacaciones únicas.
