Al entrar en el elegante vestíbulo del Camelia para registrar la llegada, el equipo de recepción recibe con todo lo necesario para llegar a la habitación con todo preparado. Mientras dure una estancia, siempre se puede encontrar a uno de sus encargados siempre a disposición del huésped, ya que la recepción estará abierta 24 horas para poder entrar o salir en cualquier momento o preguntar cualquier cuestión que surja.
Además, si se desea hacer turismo por Roma y es necesaria la ayuda para organizarse, el personal del hotel Camelia proporciona todo tipo de información turística y gestiona las reservas para museos, excursiones y otras actividades.
En cuanto al desayuno del hotel, el bufé contará con una amplia variedad de alimentación que cumplirá con las exigencias de todos los paladares. Desde múltiples clases de bollería y dulces, yogures, algunos platos calientes, tostadas y tradicionales rosettas romanas con todo tipo de rellenos. Por supuesto, se puede degustar un exquisito café italiano, desde cremosos capuccinos a intensos expressos, y gran variedad de zumos y otras bebidas. Todo ello, servido en la mesa para una máxima comodidad.
Para facilitar la estancia y resolver cualquier problema que se tenga con la ropa, el hotel dispone de un eficiente servicio de lavandería, donde poder lavar todo lo que se requiera. De esta manera, no se tendrá que buscar tintorerías fuera para tener siempre disponibles las prendas y salvaguardarlas de cualquier imprevisto.
Y para poderse mover por la ciudad de la manera más sencilla posible, existe a disposición de los huéspedes un garaje donde reservar una plaza para estacionar el vehículo. Este se podrá retirar cuando se necesites, por lo que no se pierde el tiempo dando vueltas en busca de aparcamiento. En caso de acudir sin coche, gracias a la excelente localización del hotel, se hallan numerosas paradas de transporte público cerca, por lo que la movilidad siempre resultará sencilla.