Este céntrico hotel de Ámsterdam se encuentra en un edifico rehabilitado que data de 1886 en cuyos tiempos albergaba una fábrica de diamantes. Un encanto que se ha mantenido en la rehabilitación y que le ha valido tres merecidas estrellas. Es un alojamiento ideal para una escapada romántica en pareja gracias a su decoración pensada para el amor, pero también prestan habitaciones familiares e individuales. La calle en la que está emplazado es una de las más tranquilas de la capital holandesa, por lo que el descanso después de un largo día de turismo está garantizado.
De Looier cuenta con una recepción de 24 horas y consta de ascensores adaptados para personas con movilidad reducida. Además, si eres de los que no puedes esperar para enviar fotos a tus contactos, debes saber que hay disponible acceso a Wifi. De igual manera, en sus modernas habitaciones encontrarás duchas privadas totalmente equipadas, teléfono fijo y una cafetera/tetera, por si no te apetece moverte para desayunar.
Por otro lado, tenemos la necesidad de destacar que este alojamiento está perfectamente comunicado con el transporte público y todo tipo de comercios, espacios turísticos, museos y el centro de Ámsterdam, es muy sencillo acceder a las zonas más concurridas. Está localizado en una calle muy carismática, cerca de la conocida Leidseplein, y repleta de edificios y estructuras emblemáticas de mucho valor arquitectónico, como el mismo edificio del hotel.
Gracias al magnífico servicio de De Looier y la comodidad de sus habitaciones, puedes tomarte el tiempo para disfrutar de la capital de Holanda y sus encantos. La cantidad de cafeterías y restaurantes emblemáticos que hay en la zona es tal que no te dará tiempo a probarlos todos. Aprovecha tu estancia para probar su fantástico bufé del desayuno para coger fuerzas y preparar un día largo de turismo.
