Este hotel está situado en una zona tranquila, cerca de la pequeña localidad de Gairloch, en la costa noroeste de Escocia. Gracias a su ubicación apartada y apacible en un amplio paraje natural, se trata de un lugar ideal para los huéspedes que buscan paz y tranquilidad. El aeropuerto de Inverness se encuentra a 90 kilómetros.
Este hotel familiar, de estilo rural, tiene 2 plantas en las que se reparten un total de 17 habitaciones. Además, le ofrece un hall de entrada, una caja fuerte, un bar muy acogedor, una cafetería encantadora y un restaurante con tronas para los niños. Aquellos que viajen por motivos de negocios tienen a su disposición una sala de conferencias. También cabe la posibilidad de utilizar el servicio de lavandería y la conexión a Internet. Hay plazas de aparcamiento disponibles.
Las habitaciones, de estilo rústico, disponen de baño privado con ducha, bañera y secador de pelo. También están equipadas con teléfono de línea directa, radio y televisión. Así como tabla de planchar y plancha. Podrá regular individualmente la calefacción.
Gracias a su buena ubicación, este hotel es ideal para los amantes del senderismo y de la observación de aves. En las inmediaciones se encuentra el lago Gairloch, donde se podrá bañar o pescar. El campo de golf más cercano está a una distancia de 6 kilómetros.
Todas las mañanas se le ofrece desayuno en forma de bufet, para que pueda servirse lo que quiera. A la hora de la cena podrá elegir a la carta o pedir un menú. El cliente también puede encargar comida dietética y platos especiales. Al realizar su reserva, podrá hacerlo en régimen de media pensión.