El Hotel Brixen Praha se ubica en una localización inmejorable en pleno centro de Praga. Dispone de precios accesibles y un buen servicio al cliente, lo cual hace de él una interesante opción a tener en cuenta. Uno de sus atractivos principales es que es un edificio antiguo de estilo gótico totalmente restaurado aunando pasado y modernidad evocando nostalgia.
Praga es una ciudad misteriosa que invita a perderse por sus calles empedradas y a explorar sus rincones más recónditos degustando sus platos tradicionales. Por algo llaman a Praga la Ciudad Dorada, la Ciudad de las Cien Torres o la Ciudad de Kafka.
El Hotel Brixen Praha es un buen complemento para la actividad turística que se realiza durante el día. El hotel dispone de los servicios básicos que un cliente puede necesitar, con 28 cómodas habitaciones totalmente equipadas para garantizar el descanso de sus huéspedes entre los que sobresale un buen servicio de bar y aparcamiento.
El Hotel Brixen Praha está pensado para que disfrutes la ciudad y por ello dispone de personal que puede asesorarte las 24 horas para que no te pierdas ninguno de los atractivos fundamentales a visitar.
Debido a su céntrica ubicación se puede llegar al mismo a través de metro o bus y tiene a escasos metros la principal estación de tren de Praga. Si se llega en avión a la ciudad el viaje desde el aeropuerto tarda entre 30 y 45 minutos. Hay que coger el autobús 119 hasta la estación de metro Dejvicka (línea A de metro) y hacer transbordo para llegar hasta la estación IP-Pavlova.
El hotel es ideal para venir en familia, grandes grupos o parejas. Cercano a él se dispone de multitud de restaurantes, zonas de ocio y atracciones turísticas para visitar. Praga es una ciudad en auge, cosmopolita y acogedora, una visita obligada para todo aquel que quiera conocer la vieja Europa.