Hotel Vita Stella Maris considera prioritaria la satisfacción de cada uno de sus huéspedes, por lo que se enorgullece de ofrecer unos servicios de innegable calidad. El objetivo principal de estos servicios es satisfacer cada una de las necesidades que se puedan tener durante la estancia, así como resolver cualquier imprevisto con prontitud, eficiencia y profesionalidad. A fin de cuentas, disponer de un buen alojamiento es el prerrequisito indispensable de unas vacaciones inolvidables.
Así pues, para asegurar el confort, el hotel regula la temperatura en su interior con un sistema de aire acondicionado durante la época estival y de calefacción durante el invierno; en las habitaciones particulares el sistema estará a disposición del huésped, pero en las zonas de uso común será establecido por el propio hotel.
Entre las zonas comunes destaca el restaurante, cuyos menús son exquisitos; el salón-bar, que ofrece bebidas alcohólicas a mayores de edad y gaseosas a los interesados; y la sala de desayuno, donde cada mañana se sirven desayunos diseñados para vigorizar a los huéspedes. Se puede, además, contratar un servicio de lavandería o hacer uso del autoservicio disponible.
Dado que existe la posibilidad de que se necesiten más camas que las disponibles en las habitaciones dobles y triples, se podrá solicitar que se añada un máximo de una cama a la habitación que se haya reservado, aportando un suplemento. De igual manera, en caso de necesitar una cuna, se deberá pedir su presencia con antelación.
El exterior del hotel ofrece varios servicios diseñados para aportar un mayor entretenimiento. Así, hay una piscina comunitaria para niños y otra para adultos; un jardín ubicado cerca de la piscina donde encontrar un rincón de paz y tranquilidad; y una zona de juegos para uso de los huéspedes más pequeños.
Por último, una vez en el hotel se podrá utilizar el servicio de alquiler de coches del que dispone.