Hotel Melia Plaza

El Meliá Plaza es un establecimiento hotelero de cuatro estrellas sito en la ciudad de Valencia. El recinto está preparado para acoger indistintamente a los clientes de negocios y de vacaciones y destaca por un diseño moderno a la par que funcional.

El establecimiento cuenta con un total de 101 habitaciones con servicios variables en función de la gama que se escoja. En todo caso, todas las estancias tienen climatización (aire acondicionado y calefacción), televisión por vía satélite, conexión a Internet por wifi, secador, artículos de aseo de cortesía, teléfono, baño completo, minibar individual, caja de seguridad y suelos en parqué. El recinto no acepta mascotas.

El hotel cuenta con una recepción operativa las 24 horas del día, de manera que hay plena autonomía para entrar y salir cuando se considera oportuno. Otro factor a valorar es que el personal domina varios idiomas, de forma que podrá orientar sobre todo lo relacionado con la estancia en el hotel, pero también con la visita a la ciudad de Valencia. Si se necesita, pueden cambiar divisas.

La oferta de servicios gastronómicos del Meliá Plaza destaca por su amplitud. En primer lugar, cuenta con un desayuno buffet que permite elegir entre distintas especialidades culinarias, adaptadas a todos los paladares. En segundo lugar, existe un restaurante que, a la hora de la comida y de la cena, está en disposición de ofrecer los mejores platos de la cocina mediterránea. Finalmente, si se desea tomar un café o una copa a cualquier hora del día, dispone de un bar-cafetería.

Finalmente, hay que destacar que uno de los objetivos de este hotel ha sido facilitar la accesibilidad de las personas con diversidad funcional. Por este motivo, se han eliminado las barreras arquitectónicas de manera que se ha hecho un recinto accesible para personas con la movilidad limitada.

El Meliá Plaza está en la plaza del Ayuntamiento, s/n de Valencia, es decir, en el centro neurálgico de una ciudad bañada por la costa de Valencia. La ventaja del emplazamiento está en la facilidad para visitar el casco antiguo de la capital del viejo reino, así como por su cercanía a distintas paradas y estaciones de transportes públicos que, en pocos minutos, te dejarán donde se desee.

Si bien hay varios lugares dignos de visitar en Valencia, en este caso aconsejamos conocer el edificio de la Lonja y el Mercado Central. Hay que destacar que, en ambos casos, pueden visitarse los sitios con la familia. Además, no se necesita utilizar el transporte público, puesto que están a tan solo 5 minutos a pie del hotel.

?Lonja

El edificio de la Lonja y Consulado del Mar es uno de los exponentes más importantes de la arquitectura medieval valenciana y representa la necesidad de la pujante ciudad de un lugar de referencia en el que organizar el tráfico de mercancías. Desde 1996, el edificio está considerado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Arquitectónicamente, la planta es rectangular columnada, al igual que el resto de las lonjas que se construyeron en la Corona de Aragón. La Lonja de Valencia se empezó a construir en 1482 y obedece a un estilo gótico, aunque con las lógicas adiciones debidas a las modas de cada etapa histórica. La entrada general cuesta 2 euros, pero es gratuita los domingos y festivos. El edificio está abierto de lunes a sábado de 10 a 19 horas, y los domingos de 10 a 14 horas.

?Mercado Central

Delante de la Lonja está el Mercado Central de la ciudad, que aún hoy es uno de los principales puntos de referencia para la venta de productos frescos, de ahí que tenga un innegable interés comercial. Además, hay que destacar que en este recinto suelen encontrarse productos que difícilmente estén en otras zonas de la ciudad. Hay que tener en cuenta que, en este edificio, se agrupan un total de 400 paradas, siendo uno de los mercados cubiertos de alimentación al por menor más importantes de España.

El actual edificio es modernista y se empezó a construir en 1914, contando con una superficie de 6800 metros cuadrados. Es una buena opción si se desea visitar un lugar de forma gratuita y curiosear por los distintos comercios que hay, de manera que puede irse con la familia.