El hotel San Polo ofrece 5 habitaciones individuales, 31 habitaciones dobles y una suite. También se puede solicitar una habitación triple. La habitación doble consta de 15 metros cuadrados.
La decoración es selecta y tiene un toque clásico que aporta personalidad a la estancia. Un gran ventanal permite disfrutar de luz natural. La cama, de grandes dimensiones, es idónea para descansar correctamente. Una televisión de pantalla plana, teléfono, minibar, caja fuerte, conexión inalámbrica a internet y aire acondicionado completan la oferta. No hay que olvidar el baño completo, con bañera y secador, en el que se incluyen muestras de gel y champú.
El restaurante está rodeado de un entorno magnífico. Su menú es un agradable paseo por la gastronomía salmantina. La terraza es un espacio indescriptible en el que poder deleitarse con las mejores vistas sobre la ciudad. El excelente nivel gastronómico de este espacio está a la altura de las exigencias de cualquier comensal. El encanto de este espacio merece una visita para entender mejor el éxito de este establecimiento.
La recepción no cierra por lo que te será sencillo conseguir se aconsejado de forma eficiente o bien llevar a cabo cualquier gestión que te sea necesaria. El business centre está totalmente equipado para que los profesionales lleven a cabo cualquier labor de manera sencilla. Hay una sala que hace las veces de consigna de equipajes por si necesitas dejar tus maletas antes de marcharte de forma definitiva del hotel. El parking cercano tiene un pequeño suplemento al día.
El servicio de habitaciones y el de lavandería completan esta interesante oferta. El personal del hotel San Polo cubrirá cualquier necesidad que pudieras tener durante tu estancia. A todo lo anterior hay que añadirle la calidad del descanso y la posibilidad de poder recorrer la ciudad de Salamanca de forma independiente.